Estómago, ¿bolsa de residuos?
El
médico deberá esforzarse por encontrar la fuerza y la naturaleza de lo que sea
la causa de la enfermedad
No debe machacar en lo que puede verse, no se le pide que extinga el humo sino
que apague el fuego mismo.
Theophrastus
Paracelsus, M.D., Suiza (1493-1541)
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¿Qué
guardan las personas en el estómago?
De
todo.
¿Y
qué sucede con lo que guardan?
De
todo.
Solo
mire a su alrededor. Esos desayunos de trabajo ¡cuánta tensión oculta detrás
de las sonrisas histéricas y temerosas!. ¡Cuanto
rencor rumiante en ese cafecito previo a la
entrevista con un jefe traicionero o con la pareja infiel! .....
El odio que flota en el aire de esa cena familiar tan repleta de
competencia o hipocresía y de comida que cae como un plomo!...
Aquél atracón de madrugada para calmar vaya uno a saber qué!
¿Tiene idea de hasta qué punto lastiman esos avatares que uno va
juntando y sobre los que va rumiando silenciosamente?
A
veces pareciera no existir alternativa más que ir guardando,
y así es que uno guarda, por lo general en el estómago o en algún
lugar del tracto digestivo porque uno tiene
que seguir rindiendo bien en lo suyo. Entonces, uno recurre a los remedios para
suavizar el aparato digestivo, una forma clásica y efectiva de tirar las energías
al basurero. Porque en cualquier momento el cuadro vuelve a repetirse.
La
tendencia corriente de entender los problemas menosprecia la importancia crucial
de nuestras emociones en la solución de los mismos. Lamentablemente no pude
negarse que en ciertas culturas modernas hasta
se valora el malestar emocional, se entiende el sufrimiento como algo honroso.
Los
remedios para el equilibrio emocional son a todas luces mejores, más completos.
Cuando aprendemos a trabajar las esencias experimentamos equilibrio activo, no
sedación. Un equilibrio vital que no debe confundirse con el estado de mera
contemplación, con el rezo o con estados de somnolencia. El equilibrio activo
que produce el trabajo concienzudo de una flor abre puertas de percepción.
Nuestra mente lógica de pronto comienza en cierto modo a dialogar con
nuestro cuerpo, a comprender el mensaje que nos emite mediante síntomas.
Entonces las cosas cambian. El equilibrio emocional permite un mejor
razonamiento. Cuando estamos libres de tensiones, detectamos alternativas,
evitamos dolores de cabeza futuros. El cuadro negativo o ese cuadro tan temido
no vuelve a repetirse y ya no hay necesidad de remedios de urgencia.
Si
se encuentra atascado, si se siente incomprendido y avergonzado en su amargura,
si se siente inferior o abatido en sus luchas cotidianas, llevando a cuestas la
pesada carga de la incertidumbre, de los celos, o de la envidia, sepa que no está
solo. Cuide a su estómago evitándole cargar, tener que “sintetizar” todos
esos pensamientos amargos que en su mayoría, son la consecuencia de una marea
energética que se activa una y otra vez en un mundo donde uno es uno y su
entorno.
No
mastique resentimiento.
Alimentarse
de resentimiento es como tomar veneno en la ilusión de que ese veneno matará
al enemigo.
Nelson Mandela
Para todas esas personas que en lugar de ayuda recibieron humillación, para
quienes en lugar de comprensión recibieron intolerancia, Willow, Agrímony,
Elm, Vine, Gorse, figuran entre los variados remedios de Bach que valdría la
pena considerar como recursos para aliviarse en las penas del alma. No entraré
en descripciones acerca de cómo detectar la flor especial para cada caso. Tales
descripciones figuran claramente en mis libros y manuales.
Lo que vale la pena remarcar es que un buen trabajo sobre estas esencias
permite despertar la conciencia y
comprender que es posible detener ese malgasto de energías que a diario se
observa en el resentimiento, en el odio, en la sed de venganza o de poder, en el
esfuerzo descomunal por asumir una identidad falsa, o simplemente en la apatía,
en la pérdida de la fe.
Aprender
a “pensar su problema en términos de Flores de Bach” requiere sinceridad y simpleza. Con esos únicos
ingredientes se inicia un proceso natural de consecuencias brillantes.
A continuación propongo un ejercicio para destrabar esta problemática
pero antes permítame el consejo de realizar el ejercicio con la toma de la flor
que necesite. Cuando se realiza el
ejercicio sin el acompañamiento de la energía que se está necesitando, el
ejercicio queda por la mitad. Los
beneficios no llegan. Ya sabemos lo que ocurre cuando las cosas se hacen sin
energías. El ingreso de la energía que está en falta genera ese impulso
inconfundible dejando su sello en todo trabajo de superación personal. Tenga
este detalle en cuenta. Si usted está sufriendo y tiene pensamientos que no lo
acompañan bien,hay magníficos remedios: las Flores de Bach. Trabájelas a
conciencia. Aspire a detectar la esencia justa para atender a la singularidad de
su caso, siempre diferenciado del caso de los demás. Esto no es un detalle
menor. Detectar la esencia para el asunto que nos ocupa a nosotros como
individuos singulares representa el punto crucial para que todo lo demás
progrese y se haga notar. Usted no es una generalidad, tampoco es una teoría
viviente. Usted tiene una historia única, usted es un caso único y existen
recursos y fórmulas florales que serán de diseño único para aliviar su
sufrimiento. Detectar el tipo de energía que necesita es el secreto para
iniciar un tratamiento acertado y confirmar la manera graciosa por la que el
cerebro impactado con finísima energía inicia sin resistencias un recorrido
mental nuevo y sorprendente. Sin esfuerzos, el cerebro va eliminando toxinas
psicológicas en el sueño, y abriendo puertas a esas ideas que serán las
salvadoras.
Muchas
cosas que parecen milagrosas se deben simplemente al ingreso de esa energía
especíifica que estaba en falta o debilitada.
Si percibe que el resentimiento toca a su puerta, si sufre de úlcera,
problemas de hígado, diabetes, jaqueca, si algo le da vueltas la cabeza y no
puede dormir, si disfruta con el fracaso ajeno, ya no se haga más daño
malgastando sus energías: Atiéndalas. Es simple.
-
“Que
la simpleza de este método no los aleje de su empleo"
-
Edward
Bach
¿Qué
tomamos después de tomar CocaCola?¿Qué
quiere usted beber solo unos minutos después de ese vaso de CocaCola que se
sirvió para calmar la sed? Un poco más
de CocaCola, ¿Verdad?